Ya próxima la temporada, los pescadores no ocultan su inquietud por el negativo impacto de las crecidas en las frezas

Pese a que todavía falta un mes para que se inicie la temporada truchera en León, son muchos los aficionados que ya sueñan con el cuatro de abril, día en que se abrirá la temporada en la provincia. Mientras preparan su equipo, revisan cañas, carretes y vadeadores o hacen inventario de sus moscas ordenando debidamente las imitaciones de principio de temporada, no dejan de comentar las expectativas que se presentan. Los más impacientes no esperarán a la apertura en León y se trasladarán a Galicia, Asturias o a Salamanca que abrirá la temporada durante la Semana Santa. Los más veteranos recuerdan cuando se abría la pesca el primer domingo de marzo también en los ríos leoneses. Luego se trasladó la fecha hasta el día de san José, 19 de marzo para, en la actualidad, establecer una fecha que coincide con el primer domingo de abril. Retrasar la temporada puede favorecer la eclosión de las frezas en los ríos con aguas más frías, pero en un año como éste, en el que las crecidas han sido constantes desde el comienzo del invierno, es más que probable que las frezas se hayan perdido o, como mínimo, hayan sufrido fuertes pérdidas.

La fórmula de abrir unos ríos antes que otros se llevó a cabo durante varias temporadas provocando división de opiniones, desde quienes pensaban que era lo mas adecuado hasta los que lo hacían en sentido contrario argumentando que se cargaba la presión sobre ciertos tramos de río.

El pasado fin de semana, quienes se acercaron a los ríos, pudieron apreciar la última y también la mayor de las crecidas consecutivas que se han sucedido a lo largo del invierno. Las lluvias y, especialmente los vientos del sur que tiraron mucha nieve, elevaron el caudal de los ríos que en muchos casos, se salieron de su cauce invadiendo los plantíos y las riberas. En la última semana los pantanos han acumulado tanta agua que, a partir de ahora, tendrán que desembalsar para reservar un mínimo margen en previsión de los deshielos de la primavera. Barrios de Luna, que alimenta al Órbigo, almacenó en una semana 33 hm3, lo que le ha situado con 226 de una capacidad de 308. Esta cantidad casi representa el 75 %. Riaño, el mayor de todos, almacenó 77 Hm3 en solo siete días, mas del 10 % de su capacidad total, con lo que ya supera el 84%. El Porma recogió 31 Hm3 y almacena 273 de una capacidad de 318. Otra semana igual que la pasada y rebasará el límite de seguridad. Con estas cifras parece previsible que se comience a desembalsar la misma cantidad que entra, por lo que los caudales ya no van a bajar apenas hasta que se abra la temporada y aún despues.

Cotos sobrantes. Tras la elección de cotos de pesca restan todavía por adjudicar un importante número de cotos sobrantes. Si bien los acotados mas demandados se han agotado, quedan cotos apetecibles para todas las fechas, incluso para la jornada de apertura en la que los tramos libres están totalmente abarrotados de pescadores. En los antiguos cotos intensivos de Marne y Ponferrada hay permisos para la primera semana, no así el de La Bañeza que tiene mayor demanda. Quedan permisos también en todos los cotos del Esla y los del Bierzo que, el pasado año, arrojaron peores resultados. Los aficionados deberán estar muy atentos para solicita r estos acotados en el momento en que la Junta, a través de la Web de la Consejería de Medio Ambiente, abra el periodo para solicitarlos.